El Programa. Paso Siete CXVII

Esta vez he podido evitarlo, agravar el problema. Estoy con un grupo de personas, familiares; hay una situación en que me siento perjudicado, hago un leve comentario, comienzo a notar cómo mis emociones se alteran, me siento perturbado, sufro sin actuar, pienso que lo que me conviene es salir de allí, lo antes posible, me voy. En esta ocasión he logrado que un problema, que tiene el poder de desequilibrarme, no lo empeore. Poder aguantar el sufrimiento, dejarlo para otro momento en que me sienta con la actitud de afrontarlo; sin agravarlo con un conflicto. Aunque en otras ocasiones, ante los problemas, diga cosas por impulsos, el derrotarme ante la impaciencia me está ayudando a no empeorarlos. En El Programa lo que busco es estar mejor, poder hacer la vida mejor a los que están conmigo. Los problemas siempre aparecerán, lo que necesito es no agravarlos con mi comportamiento, ese que actúa por reacción, por impulsos. Poder sentir lo esencial de El programa, vivir mi vida, dejar vivir la de los demás; mostrar mi ayuda sin intentar imponer mis deseos, que las cosas se hagan como a mí me gustaría. En esto es en lo que me ayuda mi Poder Superior, en que yo pueda poner toda mi buena voluntad en algo, Él pone el resultado, lo que me pide es que lo acepte; que no caiga en la autocompasión, en los conflictos; que pase lo que pase me lo tome con la actitud de aceptarlo, de volver a poner mi buena voluntad; de seguir en el camino de hacer la vida mejor, a mí, a los demás.