Paso Once LXXXIV, el cuerpo

La finalidad del Programa de los Doce Pasos es llegar a tener una vida alegre y feliz, independientemente de nuestras circunstancias. Este Paso Once es el que me lleva por el camino del amor hacia mí mismo. Es mi cuerpo la puerta de entrada para llegar a amarme. No podré llegar a cuidarme y quererme si primero no cuido y quiero a mi cuerpo, y para dar el Paso Doce, cómo voy a cuidar y amar a los demás sino sé hacerlo primero conmigo.
La meditación es la práctica que me reconcilia con mi cuerpo, me ayuda a valorar, cuidar y a quererlo. Practicar la meditación de agradecimiento a mis órganos, a mi corazón que esté las 24 horas funcionando y me deje estar a otras cosas; agradecer a mis pulmones, a mis ojos, oídos, a todos mis órganos que sigan funcionando las 24 horas en buenas condiciones. Es a través de la reconciliación con mi cuerpo como logro reconciliarme con mis emociones, escucharlas, calmarlas. Si quiero calmar una emoción como la ira, antes necesito calmar mi cuerpo; en un cuerpo alterado no podré calmar mi ira. La práctica de la respiración consciente es la forma de conseguirlo. Llevando mi atención a como entra el aire, inspirando, y como sale el aire, expirando, puedo conectar con mi cuerpo y calmarlo. Esta práctica del agradecimiento, y de cuidar mi cuerpo calmándolo, son los nuevos hábitos que me ayudan a tener mejores sentimientos de amor hacía mi mismo.

Entradas